Arroz con pollo

Receta de como cocinar arroz con pollo.

Si hay una receta tradicional famosa que triunfa de generación en generación es el arroz con pollo. Uno de los platos más tradicionales y habituales en los hogares de nuestro país ¿por qué complicarse la vida con platos de nombres imposibles pudiendo hacer una receta tradicional y deliciosa?

Ingredientes

• 2 tacitas de arroz (150 g)
• 2 muslos de pollo troceados
• media cebolleta
• un pimiento verde y tres tomates
• 2 dientes de ajo
• 5 tazas de agua caliente(o de caldo de pollo)
• 3 cucharadas de aceite de oliva
• sal
• hebras de azafrán
• perejil fresco picado

Preparación

A la hora de elegir el pollo puedes optar o bien por pechugas o bien por muslos. En nuestro caso hemos optado por muslos que deberán ser previamente troceados. Pero realmente esta receta puede hacerse con cualquier parte del pollo.

Para empezar con el arroz con pollo debemos hacer en primer lugar un sofrito. Para ello pelamos los ajos, los cortamos en láminas finas. También debemos picar en pedazos muy pequeños la cebolleta y el pimiento. Es importante limpiar adecuadamente el interior del pimiento, para ello le quitamos las pepitas del interior.

Cuando tengamos todas las verduras listas ya podemos proceder a hacer el sofrito del arroz con pollo. Para ello ponemos un poco de aceite es una cazuela. En cuanto esté bien caliente ponemos las verduras a cocinarse. Deberíamos dejarlas entre tres y cinco minutos. A continuación añadimos el pollo que previamente habremos limpiado y cortado en trozos.

Dejamos cocinarse el pollo junto con la verdura durante al menos 7 u 8 minutos hasta que coja color. Atención!!! se trata de que coja un poco de color, no de que se cocine por completo. La combinación de la grasa de la carne con las verduras le dará a nuestra receta de arroz con pollo un sabor único.

En lo que se va haciendo el pollo vamos preparando los tomates. Para que se incorporen bien a nuestro arroz con pollo debemos pelarlos y cortarlos adecuadamente. Si los dejamos con piel, al cocinarse se separará puede resultar un poco molesto a la hora de comer el arroz con pollo. En cuanto los tengamos listos los incorporamos con el resto de ingredientes y lo dejamos cocinarse todo junto durante cinco minutos aproximadamente.

Pasado este tiempo incorporamos el vino blanco. Una vez que hayamos incorporado el vino al arroz con pollo debemos bajar la intensidad del fuego. Con ello conseguiremos que el alcohol se vaya evaporando poco a poco al mismo tiempo que le aporta un interesante matiz al arroz con pollo.

Cuando el vino haya reducido hasta el punto deseado debemos incorporar el agua o caldo de pollo. Al respecto para quienes uséis el caldo de pollo debéis tener en cuenta que el sabor de éste no debe de ser muy intenso. De ser así el arroz con pollo perdería toda su esencia. Para darle un toque de color, y también de sabor al arroz con pollo, personalmente apuesto por el azafrán. Pero si lo prefieres puedes añadirle colorante. Con una cucharada bastará. Lo removemos bien y lo dejamos que hierva.

Después de añadir el azafrán/colorante y llevar el agua a ebullición es el momento de añadir el arroz. Tras incorporarlo debemos introducir una cuchara de madera y remover para garantizar que el arroz se distribuye de forma adecuada por toda la cazuela. Al principio debemos remover el arroz cada poco para asegurarnos de que no se pega. En este momento podemos probar el punto de sal para probar si tiene la sazón adecuada.

Pasados cinco minutos desde que hemos añadido el arroz ya no es necesario que sigamos removiendo. Bajamos la intensidad del fuego y dejamos que se vaya haciendo poco a poco. También podemos añadirle al arroz con pollo unos guisantes.

En caso de que quieras hacerlos es el momento de hacerlo en caso de que sean frescos. Sin embargo si ya están precocinados (en lata o congelados) espera hasta los últimos cinco minutos para agregarlos a la preparación. Tal vez la fuerza del fuego sea demasiado elevada. Por ello en caso de que el caldo o el agua se haya consumido puedes añadirle más cantidad. De esta forma nos aseguramos que el arroz tenga el punto de cocción adecuado y no se nos quede duro.

En cuanto haya pasado un cuarto de hora ya podemos retirar el arroz con pollo del fuego. Lo tapamos y, siguiendo las normas tradicionales de la cocina, lo tapamos con un paño de cocina limpio. Esto ayudará a que continúe la cocción mientras reposa. Con que esté cinco minutos reposando será suficiente para que el arroz con pollo tenga la textura deseada.

El autor de la receta es Pablo Ares