Salsa de tomate

Receta de como cocinar salsa de tomate especial para tus mejores platos.

Cómo preparar salsa de tomate casera. Vamos a explicarte una receta de salsa de tomate que incluye ingredientes como pimientos o cebolla para que puedas mejorar tus platos con un sabor tradicional y bueno. Así que si te animas a ampliar tus conocimientos.

Aunque quizá no lo parezca, existen diversos tipos de recetas de salsa de tomate. En este caso, hemos optado por explicarte una versión tradicional que aúna el sabor tanto del tomate como el toque de los pimientos, el ajo o la cayena. Te aseguramos que si decides prepararla, podrás acompañar tus platos, incrementando su sabor y, por tanto, también su calidad.

Ingredientes

Preparación

Para preparar tu salsa de tomate casera, lo primero que tienes que hacer es lavar los ingredientes, en este caso los tomates y los pimientos. Recuerda no tirar la piel de los tomates.

Luego coge las cebollas y los ajos y quítales las capas exteriores.

Luego corta la cebolla en tiras largas (juliana) y los dientes de ajo por la mitad.

Ahora para seguir, coge una cazuela grande y ponle el aceite de oliva virgen extra.

Pon a calentar a fuego medio y cuando veas que está bien caliente, echa las cebollas cortadas y una pizca de pimienta de cayena (o dos cayenas enteras) al gusto.

Baja el fuego y cocina la cebolla durante un cuarto de hora para que se haga bien y se dore.

Durante ese cuarto de hora, aprovecha para seguir con la salsa de tomate al cortar los pimientos y los tomates.

Cuando acabes y haya pasado el tiempo de la cocción de la cebolla, añade los dientes de ajo, los pimientos y los tomates a la cazuela.

Sube el fuego a medio-alto y ves removiendo para que no se quemen los ingredientes de la salsa de tomate.

Finalmente, cuando veas que empiecen a salir burbujas y líquido, baja el fuego a nivel medio. Luego deja que se cocine durante media hora, removiendo de vez en cuando.

Cuando haya finalizado el tiempo, coge la salsa y pásala por un pasapurés o bien bátela, pero no demasiado para que no salsa muy fina. Cuando lo hayas hecho, vuelve a echarla en la cazuela con el fuego medio-bajo.

Es momento de añadirle sal, azúcar y pimienta negra a la salsa de tomate. No obstante, antes de echar el azúcar prueba la salsa puesto que dependiendo del tomate o la cebolla puede que ya esté dulce.

Dejamos durante una hora la salsa de tomate para que se reduzca un poco y finalmente, ¡ya tienes tu salsa hecha!

La autora de la receta es Esther Cuesta