Ternera rellena

Receta de como cocinar carne de ternera rellena paso a paso y con muchas fotos.

Hoy os presentamos un plato increíblemente bueno, una receta de la madre del Maca. La verdad es que lleva un poco de trabajo elaborarlo, pero tampoco es nada del otro mundo, basta con que tengas un rato para dedicarte a el con todo el cariño que tu familia se merece. Como podéis ver, en esta ocasión El Maca se escaqueó de enrollar la carne, muy espabilado el me dijo: venga cariño!!, hazlo tú que lo haces muy bien y yo saco las fotos….

Que listo es el muy rejodío….

Ingredientes:

Depende de la economía el trozo de carne que le pidas al carnicero, porque a cuanta más calidad, evidentemente mejor saldrá el plato. Recomiendo por este orden, lomo, redondo y, si estás apurado porque es fin de mes, falda. Cuanto más grande sea el filete, mejor os quedará la receta; con el cuchillo podéis abrirlos aún más con mucho cuidado de que no se rompan, aunque es mejor que lo haga el carnicero.

Sálalo teniendo en cuenta que por dentro va a llevar jamón.

Batimos 4 huevos para hacer una tortilla francesa o dos.

Ponemos en una sartén aceite de oliva a calentar.

Hacemos una tortilla grande a la francesa…

Ahora viene la parte más técnica, de ella depende la buena pinta que saque la carne. Pon el filetón sobre la madera de la cocina y ve colocando sobre él unas láminas muy finitas de ajo y  unas tiras de jamón, no te cortes por la cantidad, el jamón le da un sabor espléndido. Por cierto, si tienes la carne desde el día anterior con ajo y perejil, mucho mejor.

Ahora pon encima la tortilla…

Extiende bien unas tiras de pimiento.

Ahora con mucho cuidado, ve enrollando el filetón. Ten paciencia y hazlo despacito, solo es cuestión de práctica. ¿Veis? Con paciencia.

Una vez enrollado, átalo con hilo especial para cocinar, pásale el hilo cuantas veces haga falta para que durante la cocción no se salga el relleno. El Maca dice que él le pide al carnicero un trozo de malla, lo que sucede es que en esta ocasión se le olvidó. También se le olvidó comprar hilo de cocinar y como veis en la foto, me las tuve que ingeniar para hacerlo con hilo de coser. Que no os pase a vosotros.

Mirad que buena pinta tienen.

Fríe el rollo en una olla, que quede bien dorado por fuera (no te preocupes, ya quedará bien hecho por dentro).

Como podéis ver, nosotros hacemos dos y nos van a sobrar, así lo que sobre lo puedes congelar y un día de esos que no te apetece cocinar, solo lo tienes que sacar y poner a calentar un rato. Aunque lo mejor es hacerlo todo y congelarlo ya hecho del todo.

En la misma olla donde hemos dorado el relleno y con el mismo aceite, cortamos una cebolla en juliana y la pochamos muy bien con cuidado de que no se nos queme. Cuando veas que va cogiendo color, le agregas el vaso de vino blanco y el caldo de carne.

Metemos los rellenos y los tapamos con agua si no nos llega el caldo. Los dejaremos unos 15 minutos para que se hagan por dentro.

Sacamos el rollo y en la madera lo cortamos tal y como veis en la fotografía. El grosor de las cortadas depende de vosotros, de vuestro gusto, pero si las cortáis muy finas no se sujetará el relleno.

Puedes quitarle el hilo antes de cortarlo, pero para hacerlo tienes que estar muy seguro de que no se va a romper todo y de que el cuchillo está muy afilado.

Vete colocando las rodajas en una olla, cuanto más ancha mejor.

Mirad que pinta tan buena y que presentación más espectacular. Ya se que se os está haciendo la boquita agua.

Le echáis por encima lo que sobró de cocer el rollo con la cebolla, todo el caldo.

Increíble la pinta ¿no?... pues mejor está el sabor, os lo garantizo…. Dejadlo así a fuego medio hasta que el caldo comience a consumirse, esto va a gusto del consumidor, pero es mejor que le quede bastante.

A la mitad de la cocción, dale la vuelta con muchísimo cuidado.

Sabrás cuando este hecho al obserbar que las rodajas por dentro ya no tienen el color rosado de la carne cruda.

Y bueno… espero que la receta os guste tanto como gusta en casa. Lo podéis acompañar de la misma salsita que ha dejado y también de unas patatas fritas que le van de maravilla.

No es por ponernos medallitas pero… ¿a que cocinamos de miedo?, vale, pues deja un comentario que a todo el mundo le gusta que de vez en cuando le hagan la ola…

Buen provecho!