Pollo al ajillo

Receta de como cocinar un sabrosísimo pollo al ajillo, paso a paso y con muchas fotos.

Verás chiquitín, no sé si a esto le tengo que llamar receta o puta venganza. Te explico,,, Hoy en Ribadesella se come de puta madre, pero hace años, cuando yo vivía allí, el asunto no era el mismo,,, si, tenías platos cojonudos,, en el Bar del Puerto o el Repollu, un pescao a la plancha pa alucinar,, en el Carroceu un chamón pa quitar el hipo,,, bueno y unos cuantos platos y lugares más,, pero cuando se metían en recetas simples como es el puto pollo al ajillo,,, ¡ostias!. Metían el pollo y un montón de ajos, todo junto y al mismo tiempo, a freír y cuando estaba el pollo tostao y, claro, el ajo más negro que la madre que lo parió, ya estaba hecho el pollo al ajillo,,, ¿Resultao?, un pollo reseco de la leche y un ajo tan amargo que, eso sí, pedías veinte botellas de sidra más. No quiero pensar que lo hiciesen a mala leche,, eso es bastante cruel.

Y aún así, muchas veces pedía ese plato,, creo que porque oír por un lao pollo y por otro ajo,, como que te apetece o porque eres tonto del culo,, pero,, eso sí,, nunca me creí que esa era la forma de hacer un pollo al ajillo,, porque no creo que tuviesen muchos clientes para pedirlo. Así que cuando me quedé sin cocinera, me dio por investigar cosas que me interesaban,, creo que el pollo al ajillo estaba en primer lugar,, jajaja,, y descubrí que el pollo al ajillo no se hace como te conté antes,, sino como te lo voy a contar ahora y esto ya tiene sentido. ¿Vamos a ello?.

Ingredientes

• Pollo cortado a trozos
• Una cabeza de ajos (Siiii, entera)
• Aceite
• Un vaso de vino blanco
• Medio limón
• Sal

Preparación

En una sartén pones aceite a calentar, bastante y por eso uso aceite de girasol, porque lo que quiero es que se tueste el pollo, nada más.

Cuando está caliente, vas friendo el pollo. Si tuviese un restaurante, usaría una freidora solo para la carne y a toda ostia,, en las fotos saldría más tostao y hasta más apetecible.

Se supone que ya has pelado y picado los ajos.

En otro cacharro pones aceite de oliva y agregas el ajo.

Sigues friendo el asunto.

Y cuando ya está,, lo vas pasando para el cacharro donde tienes el ajo.

Cuando ya esté todo le vas dando vueltas para que no se queme el ajo.

Ahora es el momento de echarle por encima y revolver el medio limón.

¿Ves que se va a quemar el ajo?, pues padentro el vaso de vino blanco. A veces,, cuando tengo caldo de carne que me ha sobrao, pues también.

No dejes de mover el asunto.

Y cuando se vaya evaporando el líquido, ¡ya está!

O no, cuando le quede un poco de salsa le incorporas unas patatas fritas cortadas a cuadrados y lo revuelves todo. Así es como me gusta a mí. Incluso,, lo sé, alguno le pondrá también un huevo frito y quizás no le estuviese mal en esta ocasión.

Después queda la presentación,, que la puedo hacer a lo pijo,, (Que no es mi fuerte y lo reconozco)

… o como le gusta a Mundo,, en plan asturianu,, ¡Buen provecho!,,, hoy,, creo yo, tendrás una alegría.